Nuestro circuito productivo
Al igual que muchos de los alimentos que consumimos, los panificados poseen un circuito productivo dividido en eslabones:
Selección de cereales
Los panificados son alimentos que pueden elaborarse con distintos cereales, siendo los más utilizados el trigo, centeno y avena. Cada uno de ellos posee características diferenciales y proporciona un valor nutricional particular. Una vez que se selecciona el cereal, este debe molerse hasta lograr una harina muy fina, lista para amasar.
Amasado
La elaboración de los panificados comprenden cuatro ingredientes principales: agua, harina, sal y levadura. Se colocan los ingredientes en amasadoras y se procesa la misma hasta lograr una masa homogénea con formación de la red de gluten.
Formado
La masa formada continua por una divisora, que es la responsable de dividir la misma en porciones iguales con la forma y el tamaño definido para cada tipo de panificado, luego se coloca cada masa formada en los moldes.
Leudado
Las porciones se trasladan a una cámara de fermentación con temperatura y humedad controlada, donde se producen los cambios propios de la acción de la levadura. En ese momento la miga alcanza su máxima capacidad de expansión en su forma cruda.
Horneado
Las unidades leudadas se cocina en hornos túneles a los parámetros de cocción ya establecidos por las tarjetas de calidad.
Envasado del producto
Antes de su comercialización y distribución, el pan está en reposo hasta lograr la temperatura requerida para ingresar en las líneas envasadoras y empaquetar los panificados para colocar en sus respectivos pallets.
Producto final
Producto final es la última etapa de los panificados dentro del proceso productivo antes de ser enviados a las distintas ciudades y localidades de la región.